Fútbol / Segunda División
«El calendario que viene es difícil y hay que sumar fuera ya»
Raúl Canales / Miranda - sábado, 25 de octubre de 2014
Carlos Terrazas | Entrenador del CD Mirandés
El Mirandés pasará en solo siete días de recibir al colista a intentar dar la sorpresa en el estadio del líder. La igualdad imperante en la categoría permite a los rojillos ilusionarse con sumar en Girona pese a que la semana pasada sufrieron para derrotar casi sobre la hora al Albacete, aunque para lograrlo, deberán mejorar su rendimiento a domicilio.
El agónico triunfo ante los manchegos ha permitido tomar un poco de aire en la tabla pero las rentas obtenidas en Anduva se antojan insuficientes si el equipo no logra sumar lejos de su afición. «En casa somos fuertes y podemos sacar muchos puntos esta temporada pero con eso no alcanza; necesitamos dar el paso de hacer un buen partido fuera», admite Carlos Terrazas.
Los datos evidencian la complejidad que representa la visita a Montilivi, ya que el Mirandés tendrá que intentar reivindicarse en un feudo que hasta la fecha solo ha podido asaltar el Real Betis. Pero los rojillos no pueden dejar pasar muchas oportunidades ya que necesitan engordar el casillero para aliviar la presión con vistas a «un calendario que precisamente no es fácil», asegura Terrazas.
Y es que después de Girona al equipo le espera otro partido fuera, en Sabadell, antes de recibir al Valladolid y viajar a Canarias para medirse a Las Palmas. Por este motivo, el resultado de Montilivi puede suponer un punto de inflexión. «Es una salida muy complicada porque nos espera un partido muy duro ante un equipo que nos va a obligar a trabajar muy fuerte durante los noventa minutos», apunta Terrazas, quien pese a incidir en varias ocasiones en la «dificultad» que entraña puntuar en el estadio catalán, considera que «también tendremos nuestras opciones».
Dominar el medio
El agónico triunfo ante los manchegos ha permitido tomar un poco de aire en la tabla pero las rentas obtenidas en Anduva se antojan insuficientes si el equipo no logra sumar lejos de su afición. «En casa somos fuertes y podemos sacar muchos puntos esta temporada pero con eso no alcanza; necesitamos dar el paso de hacer un buen partido fuera», admite Carlos Terrazas.
Los datos evidencian la complejidad que representa la visita a Montilivi, ya que el Mirandés tendrá que intentar reivindicarse en un feudo que hasta la fecha solo ha podido asaltar el Real Betis. Pero los rojillos no pueden dejar pasar muchas oportunidades ya que necesitan engordar el casillero para aliviar la presión con vistas a «un calendario que precisamente no es fácil», asegura Terrazas.
Y es que después de Girona al equipo le espera otro partido fuera, en Sabadell, antes de recibir al Valladolid y viajar a Canarias para medirse a Las Palmas. Por este motivo, el resultado de Montilivi puede suponer un punto de inflexión. «Es una salida muy complicada porque nos espera un partido muy duro ante un equipo que nos va a obligar a trabajar muy fuerte durante los noventa minutos», apunta Terrazas, quien pese a incidir en varias ocasiones en la «dificultad» que entraña puntuar en el estadio catalán, considera que «también tendremos nuestras opciones».
Dominar el medio
El técnico rojillo conoce a la perfección las cualidades de un Girona al que ha visto en acción en más de un partido a lo largo de la presente temporada. «Es un equipo muy incómodo, al que cuesta mucho hacerle goles», apunta como primer esbozo de lo que le espera al Mirandés.
Para el míster la principal característica de su rival es «la férrea ocupación» que realiza del centro del campo, con un alto número de jugadores en dicha parcela gracias a que Pablo Machín emplea una defensa con tres centrales, lo que permite que los laterales se incorporen de forma continuada al medio.
Terrazas ha estudiado en los últimos días como contrarrestar esta variante, sin que tenga que implicar necesariamente un cambio en el dibujo táctico habitual del Mirandés para reforzar con más efectivos la zona de creación. «Los esquemas solo marcan la posición inicial de los jugadores pero luego es el movimiento y el desarrollo que los futbolistas hagan del mismo lo que condiciona el juego», analiza el míster.
Además de su dominio en la medular, Terrazas destaca del Girona el «trabajo colectivo» al que añade individualidades capaces de desequilibrar el partido en acciones puntuales. Quizá el futbolista más destacado sea Felipe Sanchón, «un jugador certero y que además atraviesa un gran momento», aunque no será el único peligro de los catalanes. «Sandaza o Mata también están siendo importantes», destaca Terrazas.
Árbitro
Para el míster la principal característica de su rival es «la férrea ocupación» que realiza del centro del campo, con un alto número de jugadores en dicha parcela gracias a que Pablo Machín emplea una defensa con tres centrales, lo que permite que los laterales se incorporen de forma continuada al medio.
Terrazas ha estudiado en los últimos días como contrarrestar esta variante, sin que tenga que implicar necesariamente un cambio en el dibujo táctico habitual del Mirandés para reforzar con más efectivos la zona de creación. «Los esquemas solo marcan la posición inicial de los jugadores pero luego es el movimiento y el desarrollo que los futbolistas hagan del mismo lo que condiciona el juego», analiza el míster.
Además de su dominio en la medular, Terrazas destaca del Girona el «trabajo colectivo» al que añade individualidades capaces de desequilibrar el partido en acciones puntuales. Quizá el futbolista más destacado sea Felipe Sanchón, «un jugador certero y que además atraviesa un gran momento», aunque no será el único peligro de los catalanes. «Sandaza o Mata también están siendo importantes», destaca Terrazas.
Árbitro
En otro orden de cosas, el colegiado designado para dirigir el encuentro es Figueroa Velázquez, quien esta campaña no ha dirigido aún al Mirandés. La pasada lo hizo ante el Murcia (1-1) y en Mendizorroza (0-2).
(Foto: Truchuelo)
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