Pues resulta que la mezcla del rojo con el blanco, últimamente no le ha venido muy bien al Mirandés en lo que se refiere a la Copa del Rey. Es cierto que en el año 2011 el equipo de Pouso hizo la proeza de llegar a semifinales pero fue eliminado por el Athlétic de Bilbao que le privó de jugar la final frente al Barcelona.
El pasado año los de Pouso, tras eliminar al Recreativo en Anduva, cayeron a partido único también en El Molinón ante el Spórting de Gijón, en la segunda eliminatoria.
Y este año 2013, en la primera eliminatoria caen los chicos de Arconada en tierras gallegas de Lugo, tras empatar en el tiempo reglamentario a un gol, después de haberse adelantado Muñiz, y en la prórroga persistió el empate para perder la eliminatoria desde el punto de penalti por 4-3.
Como se ve, no le va muy bien a los rojilllos la mezcla roja y blanca.
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