A Pablo Infante, jugador del Mirandés desde la temporada 2005-06, un hombre que ha vivido los mejores momentos futbolísticos de su vida vistiendo la camisola del Mirandés, roja por los cuatro costados, ahora le ponen más colores a su próxima camiseta: la blanquiazul de la Ponferradina, la blanquivioleta del Valladolid, o la azulgrana del Eibar que con su ascenso a Primera colmaría los deseos de Pablo, que no eran otros que jugar en Primera División. Pues nos quedamos a la espera. Rumores, que no falten.
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