La primera victoria a costa del eterno rival

El Mirandés en las últimas seis visitas ha encontrado un filón en Mendizorroza, salvo un empate a dos goles, coincidiendo con el ascenso de los rojillos esa temporada, cinco victorias ante los eternos rivales. Ya no es casualidad y tenemos que decir aquello de que algo tiene el agua cuando la bendicen. Y esta victoria de hoy ha venido en un momento muy importante, conseguida por un equipo que perdía en Copa en su terreno, ante otro que ganaba en Copa y a domicilio. Los primeros tres puntos de una tacada, ya están en el talego rojillo. Enhorabuena al equipo por este balsámico triunfo para la afición.