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lunes, 19 de octubre de 2015

"En todas casas cuecen habas" (Cervantes)

Los tres escudos de arriba pertenecen a los equipos propietarios del terreno, y los tres de abajo, a los visitantes. Nos referimos a los dos partidos jugados el sábado: Mirandés-Mallorca y Leganés-Girona y al partido de ayer domingo: Deportivo-Athlétic.
Alguien dijo que las "comparaciones son odiosas", pero también hubo quien dijo que "son necesarias".
Y para refrendar nuestro titular de que "en todas casas cuecen habas" ("y en la nuestra a calderadas"), queremos poner dos ejemplos más, además de lo que le pasó al Mirandés el sábado referente al 2-0 en el marcador en la primera parte y que luego al final del partido, terminara con empate a dos desperdiciando una gran ocasión de sumar tres puntos, que hubiera sido lo lógico, es lo que se comentó tras el partido. Pues hombre, no viendo el partido puede extrañar, pero después de verlo, no tanto. Entrenador y jugadores han recibido muchas críticas por el resultado de ayer, como si el contrario no jugara. Con esto no queremos justificar al equipo rojillo, ni mucho menos, porque echó por tierra el esfuerzo de la primera mitad, por una segunda que fue dominado por el equipo bermellón y al final se nos quedaba cara de tontos cuando ya estábamos saboreando la victoria mientras duraba el descanso. Pero bien dijo aquel que "la procesión no termina hasta que pasa el último cura". Total que el Mirandés desperdició una renta de 2-0 cosechada en el primer tiempo, para terminar empatando.
Y el Leganés también como propietario del terreno. En el minuto 52 marcaba el 2-0 y en los minutos 78 y 89 empataba los de Girona.
Y ayer, en primera división, ocurrió lo mismo en Riazor. 0-2 ganaba el Athlétic en el minuto 62 y el Deportivo marcaba los dos goles para el empate en los minutos 79 y 88. ¡Pero hombre...!! Cómo Valverde y sus "leones" se dejan empatar un partido que tenían virtualmente ganado..? Pues porque esto ocurre y muy a menudo, sólo hace falta tirar de hemeroteca.
Dos ejemplos para terminar: en el año 1999 en Barcelona, en la final de la Copa de Europa, el Bayer alemán ya estaba saboreando de la Copa cuando en el minuto 91 le empataba el Manchester United y en el  93 los ingleses anotaban el 1-2. No era una ventaja de dos, pero tirar por la borda el esfuerzo de más de 90 minutos....
Y otro ejemplo que nos ha tocado vivir en nuestra familia rojilla, es que el 27 de septiembre de 1959, en la jornada 3ª de Tercera División el Mirandés se fue al descanso con una ventaja de 4-0 sobre el Elgóibar. ¿Y saben ustedes el resultado final de los 90 minutos...? ¡¡¡4-4..!!! Carlos Terrazas y los 14 jugadores que tomaron parte en el encuentro, no habían nacido.
Como se ve, estas anomalías se dan en las mejores familias.


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