RUIZ DE GALARRETA, ¿CRECER Y VOLVER?
Para Íñigo Ruiz de Galarreta (Eibar, 1993) el ascenso del Bilbao Athletic representaba una segunda oportunidad para intentar colarse en el primer equipo, además de llevar su experiencia en Segunda División a sus compañeros del filial rojiblanco.Pero al final no ha sido así, y el eibarrés marcha a ganarse el pan Leganés como cedido.
Ruiz de Galarreta debutó con el primer equipo de la mano de Mercelo Bielsa, en un amistoso donde el eibarrés despuntó dejando detalles de “crack”, una nueva perla parecía salir de Lezama, el “loco” Bielsa confiaba ciegamente en el jóven katxorro, pero cuando lo tenía todo para brillar una piedra apareció en su camino, en un partido con el Bilbao Athletic, Íñigo Ruiz de Galarreta se rompía el cruzado. Sin pensarlo puso rombo a Miranda de Ebro para vestir la camiseta del recién ascendido Mirandés, el equipo que había brillado en la Copa del Rey la temporada anterior, y, en Anduva volvió a brillar como ya lo había hecho en aquel amistoso. Pronto se ganó a la afición de Anduva con sus detalles. Pero otra vez el cruzado volvía a aparecer en su camino. Ésta vez la otra rodilla. Se cortaba otra vez la prometedora progresión del eibarrés.
La pasada campaña necesitaba recuperar la confianza, en San Mamés no tendría los minutos deseados y por ello, la cesión fue la mejor opción. Ruiz de Galarreta volvía a hacer las maletas, ahora cambiaba de casa y se iba a La Romareda.
Su llegada al equipo maño pronto creó sensación, hasta se plantearon los “blanquillos” comprar al joven mediapunta vasco, pero la larga temporada en Segunda le ha pasado factura. La Liga Adelante agota tanto en el factor físico como en el psíquico, y Ruiz de Galarreta no fue la excepción. Una primera vuelta magnífica hizo las delicias del club zaragozano, pero una vez empezó el segundo tramo de la temporada empezó el bajón, aunque siguió siendo indiscutible (36/41 partidos como titular).
Ese bajón hizo que se volvieran a perder las esperanzas, su posible regreso como rojiblanco parecía que podría acabar en otra cesión, o quizá poner rumbo fuera de Bilbao con la carta de libertad. Pero, por suerte para Ruiz de Galarreta, el filial completó su magnífica temporada en Segunda B y logró ascender a la categoría de plata. Empezaba a aparecer una luz al final del túnel. El ascenso a plata y su edad (22 años) le permitían volver al filial rojiblanco.
Su futuro durante la pretemporada fue incierto, no se sabía que haría Ernesto Valverde y su cuerpo técnico con Ruiz de Galarreta, y, los pocos minutos que tuvo durante la pre temporada parecían predecir que su futuro volvía a estar fuera de Ibaigane, y no le faltaban novias precisamente. Pero al aparecer inscrito en la “Lista A” para la Europa League con el número “28” (ficha de filial) hizo desaparecer los rumores sobre posibles destinos. Tenía posibilidades reales de quedarse en Bilbao para jugar en el Bilbao Athletic, igual que su compañero Unai López que bajaba del primer equipo al filial.
Al final no ha sido así, y el mediapunta se va a Madrid, a Leganés concretamente para crecer como futbolista, y, pero quien sabe, quizá vuelve a San Mamés dentro de poco.
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