Fútbol / Segunda División
El año rojillo empieza con un derbi
G.A.T. / Miranda - sábado, 03 de enero de 2015
El Mirandés visita al Alavés (16.00 horas) con la confianza de mantener el buen y efectivo juego que se ha alcanzado
El Mirandés se mide esta tarde en Vitoria (16.00 horas, retransmitido por la ETB) al Alavés. Un derbi para empezar el año con el que los rojillos persiguen consolidar tras el parón navideño la mejoría lograda y demostrada en el campo en la recta final del 2015, lo que les ha aupado en la clasificación, aportándoles 25 valiosos puntos, la mitad de los necesarios para tener la permanencia asegurada, colocándolos en un meritorio noveno puesto.
Pero lo que la estadística de la clasificación refleja debe demostrarlo el equipo ante un siempre incómodo rival.Para ello Carlos Terrazas cuenta con todos sus jugadores ya que no tiene sancionados, y Emilio y Josu Hernáez, que han arrastrado lesiones las últimas semanas, están ya disponibles para el técnico.
No obstante, en la convocatoria no han entrado ningún de los dos, y también se quedan fuera Docal y Sergio Pérez (el portero jugará con el B) , además de José Antonio Espín, la nueva incorporación del mercado de invierno ya que ha habido un problema burocrático con la llegada de su transfer de Grecia, país en el que estaba jugando. «Tener a todos los jugadores disponibles es lo que quiere un entrenador; la de elegir es una de las dificultades que quiero tener y los jugadores tienen que darse cuenta de que la temporada es muy larga y que en un momento determinado no son de la partida, pero eso no quiere decir que no son útiles para nosotros, todos los son, pero las convocatoria son de 18», apunta el entrenador,Carlos Terrazas.
Para lo rojillos el choque en Mendizorroza es una prueba para ver si el parón navideño ha servido para recargar fuerzas y además no romper la trayectoria de las últimas semanas, si bien el entrenador entiende que los pocos días de descanso habidos tampoco dan para que haya grandes variaciones en uno u otro sentido. «Veo al equipo con ganas de reiniciar la competición», apunta, descartando que haya habido algún tipo de relajación y deseando que el equipo sea capaz de «arrancar bien» tras el descanso para afrontar los tres partidos que restan de la primera vuelta y toda la segunda parte del campeonato.
Mirandés y Alavés se conocen a la perfección, y de hecho esta temporada ya se han visto las caras en un partido, en Copa del Rey donde los albiazules apearon a los rojillo. Pero eso queda lejos y la competición no es la misma, si bien el míster rojillo advierte de los potenciales del rival. «Es un equipo muy bien armado, consistente, sólido... en el que todos los jugadores trabajan mucho y están muy bien organizados, donde prima el aspecto colectivo», dice Terrazas. Además el conjunto ha variado mucho con respecto al de la pasada campaña, en la que los rojillos ganaron en Vitoria.
Si hace un año era un equipo que marcaba muchos goles pero también concedía muchos, ahora es un conjunto de los menos goleados de la categoría, habiendo concedido solo 20, y habiendo marcado otros 20 goles. «Cuesta mucho hacerles gol», destaca Terrazas, lo que es igualmente una de las virtudes del Mirandés, que tiene un gol menos en contra que los alavesistas. Por ello el choque se prevé muy igualado y sin sobresaltos en las porterías. «Va a ser muy igualado y muy disputado, y lo normal es que sea un partido con un marcador final ajustado... aunque nunca se sabe», dice.
Pero lo que la estadística de la clasificación refleja debe demostrarlo el equipo ante un siempre incómodo rival.Para ello Carlos Terrazas cuenta con todos sus jugadores ya que no tiene sancionados, y Emilio y Josu Hernáez, que han arrastrado lesiones las últimas semanas, están ya disponibles para el técnico.
No obstante, en la convocatoria no han entrado ningún de los dos, y también se quedan fuera Docal y Sergio Pérez (el portero jugará con el B) , además de José Antonio Espín, la nueva incorporación del mercado de invierno ya que ha habido un problema burocrático con la llegada de su transfer de Grecia, país en el que estaba jugando. «Tener a todos los jugadores disponibles es lo que quiere un entrenador; la de elegir es una de las dificultades que quiero tener y los jugadores tienen que darse cuenta de que la temporada es muy larga y que en un momento determinado no son de la partida, pero eso no quiere decir que no son útiles para nosotros, todos los son, pero las convocatoria son de 18», apunta el entrenador,Carlos Terrazas.
Para lo rojillos el choque en Mendizorroza es una prueba para ver si el parón navideño ha servido para recargar fuerzas y además no romper la trayectoria de las últimas semanas, si bien el entrenador entiende que los pocos días de descanso habidos tampoco dan para que haya grandes variaciones en uno u otro sentido. «Veo al equipo con ganas de reiniciar la competición», apunta, descartando que haya habido algún tipo de relajación y deseando que el equipo sea capaz de «arrancar bien» tras el descanso para afrontar los tres partidos que restan de la primera vuelta y toda la segunda parte del campeonato.
Mirandés y Alavés se conocen a la perfección, y de hecho esta temporada ya se han visto las caras en un partido, en Copa del Rey donde los albiazules apearon a los rojillo. Pero eso queda lejos y la competición no es la misma, si bien el míster rojillo advierte de los potenciales del rival. «Es un equipo muy bien armado, consistente, sólido... en el que todos los jugadores trabajan mucho y están muy bien organizados, donde prima el aspecto colectivo», dice Terrazas. Además el conjunto ha variado mucho con respecto al de la pasada campaña, en la que los rojillos ganaron en Vitoria.
Si hace un año era un equipo que marcaba muchos goles pero también concedía muchos, ahora es un conjunto de los menos goleados de la categoría, habiendo concedido solo 20, y habiendo marcado otros 20 goles. «Cuesta mucho hacerles gol», destaca Terrazas, lo que es igualmente una de las virtudes del Mirandés, que tiene un gol menos en contra que los alavesistas. Por ello el choque se prevé muy igualado y sin sobresaltos en las porterías. «Va a ser muy igualado y muy disputado, y lo normal es que sea un partido con un marcador final ajustado... aunque nunca se sabe», dice.
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