¡No me lo puedo creer...!

Ha terminado el partido. Flaño y Pablo camino de los vestuarios. El "divino", parece decir: "No me lo puedo creer..". Seguro que Flaño tampoco se lo cree, y nosotros tampoco. La debacle ayer en Anduva comenzó a los 5 minutos cuando Pablo regalaba un balón que aprovechaba Yuri para tomar ventaja en el marcador. No cabe duda que el Eibar tuvo ayer la suerte de los campeones, balón que lanzaban entre los tres palos, entraba. También tuvo a su favor un Mirandés desconocido en todas sus líneas, a su favor la gran parada de Irureta que evitó el empate a uno de Iván Agustín. Este partido de ayer fue la antítesis del de Mendizorroza. Ayer el Mirandés terminó caído, pero no hagamos leña de este arbol rojillo y ayudemos entre todos a levantarle.