“EL MIRANDÉS CON SUS ARMAS PUEDE PLANTAR CARA A CUALQUIERA”
Sergio Suárez no ve al Mirandés inferior a ninguno de los rivales ante los que debe mediarse en esta recta final de temporada. Así lo ha asegurado el mediapunta, quien apunta a que la variedad de recursos del cuadro rojillo suponen elementos muy a tener en cuenta para los equipos que aún están por llegar: “este equipo tiene varios tipos de juego, uno más directo y de disputas, y otra parte más cerca del toque. Yo por mis características estoy más cómodo en el segundo, pero el equipo se sabe adaptar según las circunstancias a ambos”. El hecho de llegar tras una victoria no supone a juicio del canario una relajación para el equipo, ya que, según afirma “conocemos a quien nos enfrentamos, sabemos que tenemos que estar concentrados hasta el final si queremos ganar. El sábado iremos a muerte”. Sobre el rival, Sergio destaca el nivel de trabajo y eficacia del cuadro alcarreño, su peligro en la estrategia, y la contundencia en las segundas jugadas. Pese a ello, cree que “ellos son un equipo muy fuerte, con un juego físico y que te obliga a darlo todo para competir al nivel. Pero nosotros tenemos muchas posibilidades, ya lo demostramos ante Sabadell y Almería, que son dos equipos buenísimos. El Mirandés con sus armas puede plantar cara a cualquiera”.
Sobre su estado físico tras recuperarse de la doble rotura muscular, Suárez afirma que se encuentra en óptimas condiciones después de que por precaución, la jornada anterior quedase sin tomar parte en el encuentro. Tras el partido de preparación de ayer frente al Aurrerá, el 20 se muestra optimista: “tuve muy buenas sensaciones, y aunque es un entrenamiento al fin y al cabo, y no competición, estoy ya a disposición del mister. Me encuentro bien, ha sido una lesión muy inoportuna, porque me ha hecho parar cuando mejor estaban saliéndome las cosas, pero me quedo con lo bueno y es que ya estoy a punto”.
Sobre el cuadro morado ha hablado también Carlos Pouso, quien ha valorado los méritos de un rival que, tras un inicio de temporada titubeante, ha conseguido encontrar la tecla a tiempo: “su inicio fue tímido, pero es lo habitual cuando se producen tantos cambios en una plantilla. Después del acoplamiento hemos visto un equipo agresivo, intenso, que te mete en partidos de ida y vuelta, un equipo de autor. Es un equipo agresivo y fuerte, y para nada exento de calidad”. El míster ha subrayado también la dureza de los partidos planteados por el rival a nivel de exigencia y atención, suponiendo la victoria un derroche de “sangre, sudor y lágrimas”. Pouso define al cuadro castellano-manchego como un conjunto “incómodo”, ante el que no cabe bajar el pistón en ningún momento, y que practica un fútbol “absolutamente respetable y que le está dando resultados. Un juego práctico, algo más directo del que planteamos nosostros”. Todo ello en un partido que vaticina como importante, aunque no decisivo: “son tres puntos de oro, pero el que gane no se salva, y el que pierda, no baja. Después del sábado va a seguir habiendo liga, aunque como el resto, nosotros lo tomamos como una final”.
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